Sunday, December 10, 2023

Bendecidos

Psalm 8:3-4
Cuando veo Tus cielos, obra de Tus dedos,
La luna y las estrellas que Tú has establecido,
¿Qué es el hombre para que te acuerdes de él,
Y el hijo del hombre para que lo cuides?

Somos una creación increíble. En muchos niveles. Nuestros cuerpos luchan constantemente por mantener un equilibrio químico para sostener la “vida”. Luchan internamente contra bacterias, virus, parásitos, mala comida y mala nutrición. Tienen que lidiar con delincuentes, accidentes automovilísticos, caídas, cortes, rasguños, cambios de clima y otros desafíos externos. Estamos estresados, inundados de información, pérdida de moralidad y muchos otros principios negativos que afectan el funcionamiento emocional del cuerpo. ¡Estamos increíblemente hechos! Nuestros cuerpos consumen alimentos, descansan por la noche y nos levantamos para afrontar otro día una variedad de cosas que quieren dañar nuestra existencia, interna y externamente. Y lo hacemos día tras día – LA MAYORÍA de las veces – con éxito. ¡Nuestro Creador es asombroso!

A veces nos tomamos el tiempo para mirar el sol (un vistazo). Esta enorme y brillante bola en el cielo que calienta la Tierra a 150 millones de kilómetros de distancia. La luz que sale del sol tarda unos ocho minutos en llegar hasta aquí. El sol es una estrella más o menos pequeña. Dios creó muchas estrellas que son más grandes, más brillantes y más calientes. El sol es exactamente lo que necesitamos para seguir vivos aquí.

Dios colocó el sol donde está para que podamos vivir en este planeta. Él nos tenía en mente cuando colgó las estrellas (incluido el sol) y la luna. Cada día recibimos nuevas e increíbles fotografías de estrellas que están muy lejos. Son hermosos e impresionantes. Dios los colocó allí porque disfruta de Su creación. Él es artístico.

Lo que más disfruta Dios en Su creación son Sus hijos. Sus elegidos. Tú y yo. ¿Cómo puedo SABER eso? Porque envió a su único Hijo a morir por nosotros. Él no hizo nada parecido a eso para NINGÚN otro aspecto de Su creación. NOSOTROS somos importantes para Él.

Debemos mostrarle el agradecimiento que sentimos hacia Él por hacernos tan importantes. Deberíamos anhelar ser como Él. Le gusta vernos intentar aprender a ser como Él. Él nos ama. Deberíamos corresponderLe el amor. No con palabras. Con nuestras vidas.


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