2 Corintos
5:21
Al que no conoció pecado,
lo hizo pecado por nosotros,
para que fuéramos hechos justicia de Dios en Él.
El que no conoció
pecado. Jesucristo – Emanuel – Dios con nosotros – Dios “envuelto en carne”.
Totalmente hombre y plenamente Dios. Fue “tentado en todo según nuestra
semejanza, pero sin pecado” (Heb. 4:15). Vivió una vida perfecta en este mundo
caído. Cumplió la ley para que Su sacrificio fuera digno. Era un Cordero sin
defecto (1 Pe. 1:19).
¿Y cuál fue la respuesta del “mundo” a una vida perfecta y sin pecado?
“Crucifícale”. (Mt. 27:22-23) Hay un concepto en este versículo (2 Cor. 5:21) que quizás
nunca entenderemos. Dios, el Padre, “envió a su único Hijo” (Juan 3:16) y “lo
hizo pecado”. El único ser humano sin pecado, Jesucristo (Dios envuelto en
carne), nacido de una mujer, fue “hecho pecado”. No entendemos lo que eso
significa. De alguna manera, Dios puso TODOS los pecados, las cargas
espirituales, el dolor, la vergüenza y el castigo justo sobre Su único Hijo –
Jesucristo – en la cruz. Jesucristo ha pagado por todo el castigo eterno que
merecemos. Lo pagó íntegramente. Somos “redimidos” (Efesios 1:7).
No sólo somos “perdonados” de nuestros pecados. Al mismo tiempo, el
Padre ofreció a Jesucristo como el sacrificio perfecto: nos hizo Su justicia. En la cruz tuvo lugar una
transacción increíble y completamente injusta (para Dios). Jesucristo tomó
sobre sí nuestros pecados – y al mismo tiempo – “puso” en nosotros Su justicia cuando creemos. No sólo somos
eternamente perdonados, sino que también somos tan justos como Jesucristo,
aunque todavía no podemos “ver” esto. Somos “salvos” – eternamente – pero
nuestra salvación no será completa hasta que Jesucristo reine sobre todos (1
Cor. 15:23-25).
En esto está el amor: no que hayamos amado a Dios, sino que Él nos amó a nosotros y envió a Su Hijo como propiciación por nuestros
pecados. (1 Juan 4:10)
Reflexionemos sobre lo que Dios ha hecho. Y honrémosLo y alabémosLe.
Favor de escribir tus comentarios o preguntas aquí. Gracias.
ReplyDelete