Filipenses 1:12
Quiero que
sepan,
hermanos,
que las circunstancias en que me he visto,
han
redundado en un mayor progreso del evangelio,
A
Pablo no le preocupaban, de ninguna manera, sus circunstancias. (Estaba en prisión cuando escribió estas
palabras). De hecho (su propio testimonio), sus circunstancias fueron
proporcionadas por un Señor soberano y amoroso que fueron utilizadas para
promover las buenas nuevas del Señor Jesucristo.
La
mayoría de los cristianos que conozco hoy no se sienten cómodos con sus
circunstancias. Y dedican la mayor parte
de su esfuerzo y energía a intentar “mejorarlos”. ¡Qué desperdicio de vida! Jesucristo, nuestro Señor, dejó las
“circunstancias” de perfección en el cielo para “salvarnos” de un infierno
eterno. Él no se quejó de sus
circunstancias mientras caminaba con nosotros en esta vida caída y sucia.
En Su
venida, Él cambió eternamente nuestras circunstancias. Eternamente alterado. Pero no aquí.
Aún no. La iglesia de Jesucristo,
Su cuerpo, crecería mucho y rápidamente si Sus hermanos y hermanas "adoptados" confiaran en Él y dejaran de intentar cambiar sus circunstancias aquí. Una “vida mejor” aquí es egocéntrica y
equivocada. Una persona comprometida con
Jesucristo se concentrará en Él y Su reino.
Y este enfoque los hará útiles para Él aquí y ahora. Un cristiano que se centra en una “vida
mejor” no honra a Jesucristo aquí y sufrirá las consecuencias de su
egocentrismo cuando Lo encuentre.
Es
mucho mejor vivir completamente para Jesucristo hoy y confiar en Él para una
existencia eternamente bendecida que “gastar” nuestros esfuerzos tratando de
“arreglar” erróneamente la vida en este mundo caído y tener poco en el cielo y
nada cuando salgas de aquí. Nuestras circunstancias, cualesquiera que sean, son
parte de Su plan. Es mejor honrarLo
hoy. CompárteLo hoy. SeLe útil hoy. Y el día de mañana también debería dedicarse
a honrarLo. Merece ser honrado. Dejó el cielo, se humilló y murió en nuestro
lugar. "Pasemos" el resto de
esta vida honrándoLo por todo lo que nos ha dado. Porque Él dio Su vida para nosotros. Jesucristo nos amó con todo. Debemos regresar el mismo – todo – a Él. Y cuando vivimos esto – dejamos de quejar de
nuestras “circunstancias”. Y vivimos
sencillamente, completamente – por y para Él.
Quiero que sepan,
hermanos,
que las circunstancias en que me he visto,
han redundado en un mayor progreso del evangelio,
Favor de escribir tus comentarios aquí. Gracias.
ReplyDeleteMuy buen mensaje, me da otra perspectiva, Dios te siga bendiciendo Randy
ReplyDeleteGracias. Igual. Dios te bendiga.
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