Tuesday, April 8, 2025

Más Que Entendemos - Mucho Más

Romanos 5:10
Porque si cuando éramos enemigos 
fuimos reconciliados con Dios 
por la muerte de Su Hijo, 
mucho más, 
habiendo sido reconciliados, 
seremos salvos por Su vida.

En el capítulo 5 de Romanos, Pablo considera las bendiciones de “haber sido justificados por la fe”. Dios nos hizo “creer”. Nuestra “creencia” en DIOS nos reconcilia con ÉL. Es DIOS QUIEN ha hecho esto. La palabra “reconciliar” debe de estar claramente entendido. En nuestra vida vieja - “elegimos” negar Dios. “Dañamos” nuestra relación. Fuimos “separados” de nuestro Creador por nuestros pecados. Y DIOS, QUIEN ES rico en misericordia, decidió enviar a SU único HIJO a morir por nosotros. JESUCRISTO - hombre perfecto y DIOS perfecto – en una persona, ofreció SU sangre (“la vida está en la sangre” Lv. 17:11) y SU vida en nuestro lugar. Somos eternamente perdonados por el castigo y el sacrificio que JESUCRISTO ofreció en la cruz. Habiendo sido eternamente perdonados, somos “reconciliados” con DIOS. Nuestra relación con ÉL fue (y ES) restaurada. “Reconciliado” significa restablecer una relación dañada o rota. Ahora somos “sacerdotes reales” (1 P. 2:9) del Dios viviente. (Y debemos vivir como tales).

Dios hizo esto por nosotros mientras éramos sus enemigos. Dios nos reconcilió conSIGO MISMO mientras pecábamos contra ÉL. Dos versículos antes, en Romanos 5:8, Pablo declara: “Mas Dios demuestra SU amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, CRISTO murió por nosotros”. Nos reconcilió con ÉL MISMO mientras LO negamos. ÉL hizo esto porque eligió demostrar SU amor a una creación caída.

Así que, ahora mismo, en este momento, somos reconciliados. Podemos hablar con nuestro Papá, Papí (PADRE - un término que se nos dice que podemos usar para referirnos al CREADOR omnipotente de todo). Él es nuestro PADRE celestial. Y nos escucha. JESUCRISTO, SU único HIJO, reside en nuestro corazón junto con el ESPÍRITU SANTO. Tenemos una relación eterna con ellos que comenzó en el momento en que nacimos de nuevo. Somos seres reconciliados que pueden compartir con su Creador y Salvador. Pablo toma este hecho y añade más bendiciones en este versículo.

No solo hemos sido “reconciliados” – sino que somos “salvos”. “Salvos” de una eternidad en un lago de fuego. “Salvos” del dolor eterno – llanto y crujir de dientes. Nuestra "salvación" es una palabra que usamos – por ahora. "Salvos" es un término que se escucha con frecuencia en la iglesia. Se usa con ligereza. En este versículo – Pablo no toma el término a la ligera. "Seremos salvos". Nuestra "salvación" no está completa. En el instante en que nacemos de nuevo (somos salvos), comenzamos el proceso de santificación. Comenzamos a aprender a morir a nosotros mismos. Comenzamos a ser moldeados a SU imagen. Esta es una pequeña parte de nuestra "salvación". Ser "salvos" en este mundo caído y maldito no es "quiénes" somos.

Fuimos reconciliados con Dios mientras éramos sus enemigos. Si Dios hizo esto por nosotros – ¿cuánto más hará cuando “somos vestidos” de cuerpos sobrenaturales? Aquí es donde Pablo señala con este versículo. Hemos sido salvos por un Dios que transformó la creación en una cruz. Y no “sabemos” qué significa ser “salvos”. Sabemos que lo somos. PERO – no comprendemos el significado de la palabra. Y Pablo lo señala en este versículo. Hay una diferencia entre reconciliarse y ser salvos. Es una bendición eterna ser “reconciliados” con nuestro PADRE celestial. ÉL comparte con nosotros en conversaciones porque nuestra relación fue “restaurada”. Ser “salvos” es mucho, mucho más. Ser “salvos” define quiénes SEREMOS cuando somos vestidos de lo “sobrenatural”. Salvos define “quiénes” ÉL nos ha hecho porque ÉL nos amó en la cruz. Y nos asombraremos. Nos sorprenderá lo que nuestro SEÑOR ha hecho por nosotros. “Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han subido al corazón del hombre, son todas las que Dios ha preparado para los que LE aman.” (1 Cor. 2:9) “Salvos” de la destrucción eterna se aclarará cuando dejemos este mundo caído. Entenderemos de qué fuimos “salvos” y en qué fuimos “salvos”.

Y LO alabaremos por SU amor y SU gracia hacia nosotros. Y estaremos felices de haberLE servido en esta vida. ÉL merece nuestras vidas mientras estemos aquí y no comprendamos del todo lo que ÉL ha hecho. ÉL merece todo lo que somos – por lo que ya ha hecho. Honra a JESUCRISTO con tu vida hoy. ¡Tu futuro es increíble! 😊
Porque si cuando éramos enemigos 
fuimos reconciliados con Dios 
por la muerte de Su Hijo, 
mucho más, 
habiendo sido reconciliados, 
seremos salvos por Su vida.

1 comment:

Apocaliptar (en TexMex) - Abrir / Desplegar / Revelar / Entrar La Puerta

Salmo 119:130  La exposición ( פֵּתַח   al abrirse) de Tus palabras imparte luz;  Da entendimiento a los sencillos.   Es BUENO “revisar” los...