Entren Por SUS "Puertas"

Salmos 100:4  

Entren por Sus puertas con acción de gracias, 

Y a Sus atrios con alabanza. 

Denle gracias, bendigan Su nombre.

Entrad por sus puertas… ¡Qué pensamiento tan interesante e increíble! ¿Qué puertas? (Hay varias posibilidades – y estoy seguro de que el Espíritu Santo las tenía en mente cuando inspiró al salmista a escribir estas palabras…)

                a)        Las puertas del “hoy”. Al abrir los ojos – entramos por las “puertas” de este día – que el SEÑOR ha hecho. (Sa. 118:24) SI tan solo recordáramos esto – cada mañana – HOY es el día que el SEÑOR ha hecho. Nos regocijaremos – sin importar las circunstancias – porque ÉL “hizo” este día. Debemos “entrar por sus puertas” con agradecimiento.

                 b)        Las puertas de “SU Cuerpo - la iglesia”. Debemos “entrar” en la iglesia con gratitud / agradecimiento. Debemos “mirar” a las personas que luchan, confundidas, gloriosas y eternas que se reúnen allí y estar agradecidos por cada una de ellas. Luchan con los mismos fracasos y defectos. Y anhelan aliento / ánimo. Buscan que se les recuerde la “esperanza que hay en nosotros” (Rom. 5:5). (Este parece ser el significado más probable de "las puertas". El “templo” de Jerusalén tenía puertas y atrios).

                   c)        Las puertas del cielo. Un día – veremos descender el "nuevo cielo". Tendrá doce puertas. Cada puerta es una perla (Ap. 21:21). ¡Perlas del tamaño de puertas grandes! La calle de la ciudad será de oro – transparente – oro puro. Y estaremos agradecidos de una manera inconcebible. Nuestra gratitud no tendrá palabras para expresar lo que sentimos y vemos. Porque nuestro SEÑOR es más que bueno. ¡Él ama enseñar! Él ama amar a Sus hijos escogidos. Y SOMOS amados. Incluso ahora. Simplemente elegimos no “creerlo”. Pero – SOMOS amados.

Y un "día" – ENTRAREMOS por Sus puertas con agradecimiento y alabanza. Sus puertas eternas. Caminaremos por el cielo – viendo y hablando con Noé, Jonás, Pablo, Pedro – y sobre todo – con nuestro SEÑOR JESUCRISTO. LO CONOCEREMOS cara a cara. ¡Y estaremos GOZOSOSOS! Porque ÉL nos ama. Más de lo que entendemos. 

Por “ahora” – hoy – denLE gracias. Bendigan SU nombre. 

ÉL nos ha preparado un futuro que supera nuestra imaginación. ¡ÉL es un Dios muy, muy bueno!

Entren por Sus puertas con acción de gracias, 

Y a Sus atrios con alabanza. 

Denle gracias, bendigan Su nombre.