Proverbios 13
Por favor lea Capítulo 13 de Proverbios
Cuando vivimos nuestras vidas deseando compartirlas con nuestro Señor, se nace el deseo de hacer las cosas con diligencia. Se nace el deseo de honrar a Jesucristo. (Col. 3:17) Cualquier proyecto (pequeño o grande) que emprendamos, queremos dejarlo tan bien hecho que nuestro Señor siente amado y respetado. Y, cuando vivimos la vida diaria así, quedamos satisfechos que estamos compartiendo nuestra existencia con El.
Hay quien pretende ser rico... Es impresionante cómo la gente que vive para enriquecerse casí nunca entiende que engaña a sí misma. "La riqueza" según este mundo es falsa. No dura. Se acaba. Porque está hecho del polvo. Mucha gente rica ha muerto y ahora tiene menos que nada. Están sufriendo bastante. Pero la persona amable y generosa es rica. Rica en esta vida porque disfruta la paz y el amor que le brinda Jesucristo. Rica en la vida venidera también porque guarda sus tesoros en el cielo (Mt. 6:20) donde será recompensada eternamente. Aunque según el "mundo", parece cada vez más pobre a medida que comparte lo que tiene.
El versículo comienza con la idea del hombre "bueno". La bondad y el bueno se transfiere de generación a generación. El hombre que ama al Señor deja una "buena" herencia. Pero, la riqueza que siempre llama al pecador es vacío. No la lleva con él cuando muere. El justo, en el milenio, usará la riqueza del pecador. Jesucristo quiere que vivimos por la fe, no por la vista.
La cultura actual no cree en "dar nalgadas" a los niños. Y mira dónde estamos. Los niños no pueden aprender, no pueden concentrarse, no quieren obedecer... La Biblia es clara. Necesitamos disciplinar a nuestros hijos cuando son pequeños para su propio beneficio.
No comments:
Post a Comment