Gente Comprometida y Pensativa

Josué 24:15

Y si no les parece bien servir al Señor, 

escojan hoy a quién han de servir: 

si a los dioses que sirvieron sus padres, 

que estaban al otro lado del río, 

o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitan. 

Pero yo y mi casa, serviremos al Señor.

¡¡Nuestro Dios es un DIOS BUENO!!  ÉL ha sido muy generoso con nosotros.  Nos espera SIEMPRE con Él cuando dejemos esta vida.  No unos pocos meses o años – PARA SIEMPRE.  ¿Y qué nos pide?  Lo mismo pidió a Su pueblo escogido – Israel – en el Antiguo Testamento.  Él también fue muy BUENO con ellos.  Josué dedicó los primeros catorce versículos del capítulo 24 a ofrecer un rápido repaso de la historia de Su pueblo escogido – Israel.  Dios les había mostrado Su poder y Su fidelidad hacia ellos.  Nuestro Señor – Jesucristo – ha hecho aún más por nosotros de lo que Dios hizo en el Antiguo Testamento.  Él murió para que nosotros podamos vivir - eternamente en el cielo.

Y hoy se nos pide que hagamos lo mismo que Josué le pidió al pueblo de Israel que “hiciera” hace unos 3,500 años.  “Servir al Señor”.  NO nosotros mismos.  La respuesta de los judíos en Josué 24 fue – "Serviremos al Señor".  Poco después de este compromiso, olvidaron su promesa.  Se volvieron egoístas y sirvieron a otros dioses.  Y el pueblo de Israel ha sufrido durante siglos debido a su vida egocéntrica.

¿Hemos hecho “nosotros” algo mejor?  Los cristianos son mucho más conscientes del amor de Dios hacia ellos que el pueblo de Israel.  “Sabemos” que Dios se vistió en la carne de la humanidad – nació de una mujer – y murió en una cruz terrible porque nos amó.  Murió en nuestro lugar.  Y Él “razonablemente” / “racionalmente” (Rom. 12:1-2) nos pide que LE sirvamos.  Mientras “vivimos” en este planeta caído, polvoriento y egoísta.  SírveLE.  ¿Y cuál es la respuesta de casi todos los cristianos en los Estados Unidos – “Soy eternamente salvo – ¿dónde puedo comprar más distracciones / entretenimiento?”  La mayoría de los cristianos que conozco en este país no están interesados ​​en “servirLE”.  Se presentan en la iglesia, hablan algunas palabras espirituales y corren a casa para “comprar más cosas y entretenerse aún más”.  Esto NO es servir al Señor.

Una vida “cristiana” es diferente a la mayoría de las vidas que usted y yo conocemos. Es una vida de dar a los demás. Dar generosamente a los demás. Literalmente “no poseemos nada” en esta vida caída. Nunca poseeremos nada aquí. TODO pertenece a Jesucristo. ÉL simplemente quiere “ver” cuánta atención préstamos. Cuánto aprendemos de Josué y del pueblo de Israel. Y cuánto apreciamos lo que Él ha HECHO por nosotros. Ya que recibimos "para siempre en el cielo", debemos dar todo lo que somos y tenemos para servirLE aquí. A otros. Para Su honor y Su gloria. ¿Qué tal ser más generoso hoy? Comparte tus “cosas” (dinero, pertenencias). Comparte el amor de Cristo por quienes te rodean (evangeliza). Anime a otros cristianos a estudiar Su palabra y vivir para Él (discipulado). “HAZ” esto hoy. “Mi casa y yo serviremos al Señor”.  Amén.

Y si no les parece bien servir al Señor, 

escojan hoy a quién han de servir: 

si a los dioses que sirvieron sus padres, 

que estaban al otro lado del río, 

o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitan. 

Pero yo y mi casa, serviremos al Señor.