Monday, November 4, 2024

Vidas Nuevas - Diferentes del Pasado

2 Corintios 4:11
Porque nosotros que vivimos, 
constantemente estamos siendo entregados a muerte 
por causa de Jesús, 
para que también la vida de Jesús 
se manifieste en nuestro cuerpo mortal.

Nosotros que “vivimos”… Nuestros cuerpos físicos están vivos y funcionando.  Trabajamos, comemos, dormimos – realizamos todas las funciones humanas básicas.  PERO – la “vida” para un cristiano es profundamente diferente a la “vida” para un no creyente.   La única “vida” que un no creyente tiene y tendrá (hasta que sea “salvo”) es una vida basada en una separación orgullosa y egocéntrica de su Creador.  Esto es todo lo que jamás tendrán a menos que Dios “actúe” sobre ellos y haga que sean salvos. (Efe. 1, 2 Cor. 5) Insisten en actividades placenteras porque su vida no lo es.  Una separación permanente de Dios deja un hueco que se esfuerzan por “llenar” con distracciones y pecado.  Por otro lado, un cristiano tiene una “vida nueva”.  Ellos “nacen de nuevo”.  (Jn. 3) Hay un ser “nuevo” dentro de su carne.  Y el Espíritu Santo y Jesucristo vienen a “morar” con ellos en su nueva “vida” – en su “corazón”.  Como consecuencia de esta increíble transacción de hacernos “nuevos”, el Espíritu SANTO, nuestro santo Salvador y nuestro santo Padre nos piden que vivamos una “vida” que LOS honre.  Respetuosamente nos piden que “nos entregamos a la muerte” a nuestras costumbres egocéntricas y pecaminosas.

Dios ha proporcionado la información que necesitamos para vivir una vida santa.  “Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre / la mujer de Dios sea perfecto, equipado para toda buena obra.”  (2 Tim. 3:16-17) Mire atentamente la última parte de este pasaje – la palabra de Dios es “suficiente” para hacernos “perfectos, preparados para toda buena obra”.  Aquí debemos aprender la importancia de conocer la palabra de Dios.  Su Palabra nos informa y nos prepara para “vivir” para Él.

PERO – no sólo necesitamos aprender Su palabra, debemos aprender a “morir”.  “Morir a nosotros mismos”.  (Gál. 2:20; 1 Pe. 4:2)  Nos convertimos en sirvientes de quienes nos rodean.  Y aprendemos aún más profundamente la verdad de la palabra de Dios cuando Jesucristo declaró –“Más bienaventurado es dar que recibir”. (Hechos 20:35) A medida que aprendemos a servir, queremos “morir a nosotros mismos aún más”.  Porque nuestro Señor no puede mentir.  Somos bendecidos cuando “morimos”.

Entonces, si “naces de nuevo”, realmente tienes “vida”.  Una vida eterna – con el Dios vivo que comenzó en el momento en que fuiste “salvado” del infierno.  Y debemos comenzar a disfrutar de nuestra “nueva” relación con nuestro Padre celestial mientras estemos aquí, en este mundo caído.  Esta relación se profundiza y fortalece a medida que “morimos” continuamente.  Nuestra carne NO debería dictar lo que “hacemos” o “cómo” vivimos.  Tenemos una relación “nueva” con Dios porque Jesucristo nos redimió de la esclavitud del pecado.  Somos santos.  Hecho “nuevo”.  La única manera en que podemos respetar esta “nueva” santidad es a través de nuestra “muerte” a nosotros mismos.  NO sabemos “cómo” vivir esta vida.  Necesitamos aprender a “caminar por fe”.

A medida que “morimos” y Le pedimos constantemente a Jesucristo que nos “ayude” a saber qué “hacer” hoy, recibimos más discernimiento.  Podemos “entender” cuándo las cosas honran a Cristo y cuándo no.  Aprendemos a elegir honrarLo más a menudo.  Reconocemos ante nosotros mismos y ante los demás que no somos “suficientes”.  No tenemos nada que ofrecer excepto Jesucristo y Él crucificado.  SI ofrecemos este buen consejo – todo el tiempo – nuestras vidas Lo honrarán más.  "En mi debilidad – ÉL es fuerte."  (2 Cor. 12:10) Y Su fuerza es TODO lo que necesitaremos en esta vida caída.
Porque nosotros que vivimos, 
constantemente estamos siendo entregados a muerte 
por causa de Jesús, 
para que también la vida de Jesús 
se manifieste en nuestro cuerpo mortal.

1 comment:

Inevitable

Lucas 12:40   También ustedes estén preparados ,  porque el Hijo del Hombre vendrá  a la hora que no esperan . Es bueno poner estas palabras...