Isaías 1:17
“Aprendan
a hacer el bien,
Busquen la
justicia,
Reprendan al opresor,
Defiendan al huérfano,
Aboguen por la viuda.”
Isaías es un
profeta claro. La claridad de DIOS no es fácil ni cómoda para los pecadores
confundidos. (Es recomendable leer el capítulo 1 de Isaías para comprender con
mayor claridad y profundidad el versículo 17). “Aprendan” a “hacer” el bien. La
gente de Jerusalén, donde profetizó Isaías, aún traía sus ofrendas. Iban al
templo todos los sábados (el día del descanso para ellos). Oraban y se reunían
con los demás judíos en las festividades correspondientes. “Vivían” su
cultura espiritual.
Pero al igual que
Caín – su ofrenda (y su presencia en SU templo) fue despreciada. Fue rechazada
por DIOS. “Entonces el SEÑOR dijo: ‘Porque este pueblo se acerca a mí con sus
palabras, y me honra con sus labios, pero aleja de mí su corazón, y su
reverencia hacia mí es una tradición aprendida de memoria’” (Isaías 29:13).
“Cuando vienen a presentarse delante de Mí, ¿quién demanda esto de ustedes, de
que pisoteen mis atrios?” (Is. 1:12). No temieron a DIOS. No LO honraron con
sus vidas. Y DIOS SABÍA. ÉL SABÍA “por qué” ellos “hicieron” lo que “hicieron”.
En SU ira, DIOS
envió a Isaías para informar al pueblo que estaban confundidos. No debían “presentar”
sus cuerpos en SU templo mientras sus corazones buscaban mayor comodidad –
mientras estaban enfocados en sí mismos. Y aquí estamos hoy – en el siglo XXI –
“haciendo” lo mismo. Los miembros de la “iglesia” se presentan – dan las
respuestas correctas a las preguntas espirituales – incluso pueden ganar los
concursos bíblicos en las “actividades” que comparten – pero sus corazones no
están entregados a DIOS. No “viven” la última parte de Isaías 1:17. Lejos de
ellos está “buscar justicia, reprender al cruel, defender al huérfano o abogar
por la viuda.” En Compañerismo Cristiano – nos sentimos bendecidos por
simplemente pagar la renta cuando hay mucho más que “hacer”. Pero los miles de
dólares mensuales que ganan los miembros de la iglesia se “gastan” en otras “cosas”.
E Isaías 1:17 se vuelve más duro – más cruel – hacia “nosotros”. En la “iglesia”
no pensamos en los demás. Simplemente realizamos el acto “espiritual”. Mientras
que la frustración de DIOS con el grupo de creyentes — en tiempos de Isaías,
los judíos— hoy, los cristianos — aumenta. Nosotros “actuamos” como
cristianos. Pero no SOMOS cristianos en las vidas que vivimos.
Así que –
volvamos a la primera instrucción de Isaías 1:17: “Aprendan”. Necesitamos
pensar con claridad antes de poder “aprender”. Necesitamos entender que NO
estamos “viviendo” vidas cristianas antes de que podemos “aprender” algo. La
convicción debe ocurrir. La convicción viene del ESPIRITU SANTO. Debemos pedirLE
a DIOS que nos ayude a ver cuánto LE fallamos. Debemos entender que no
entendemos “cómo” ÉL quiere que “hagamos” la iglesia. Debemos entregar nuestras
vidas a ÉL, no a nuestra incesante necesidad de obtener un estilo de vida “mejor”.
“Aprendan”. Seamos como niños. Reconozcamos que nuestro comportamiento pasado NO
es aceptable. Debemos “vivir” para DIOS – no para nosotros mismos.
Después de ser convencidos de la profundidad de
nuestro egoísmo, y comenzamos a “aprender” – debemos “aprender” a “HACER EL
BIEN”. Isaías dedica las siguientes palabras a definir “qué” es el BIEN:
1) “Buscad
la justicia”. NO escondes de la justicia. Búscala. HACED lo correcto. Exigid
justicia primero de nosotros mismos y luego de quienes nos rodean. “Busquen la
justicia”. Desead honrar a DIOS con tu vida. Animad a los demás hermanos y
hermanas a HACER lo correcto. Busquen la justicia. SÉ santos. SÉ justos. Busquen
la justicia.
2) Reprende al opresor.
"Dile" a la gente cuándo son desconsiderados y egoístas. Diles a los
homosexuales que su "orgullo" por estar confundidos en su estilo de
vida no termina bien para ellos. Reprende a quienes se equivocan.
"Díselos". Alza la voz. Reprende al opresor.
3) Defiendan al
huérfano. DIOS nos buscó cuando éramos débiles y perdidos. ÉL nos pide que “hagamos”
lo mismo. Ayuda a tu iglesia a ayudar a otros. Involúcrate en “hacer” el bien a
quienes menos tienen. Da MÁS de ti y de tu dinero a quienes son más débiles.
DA. Contribuye al BIEN que ÉL quiere que SU cuerpo HAGA. Comparte tu vida con
quienes menos tienen. Defiende a quienes no pueden defenderse.
4) Aboguen por la
viuda. Ayuda a la mujer que no tiene los recursos necesarios para seguir
adelante. Dale más que un estudio bíblico y tus oraciones. Entrégala tú mismo.
HAZ EL BIEN.
Cuanto más comprendamos cuánto fallamos – más se convertirá este
versículo en una bendición y no en una amenaza. Habrá quienes lean este
devocional y se alejen. Rechazarán las instrucciones que DIOS dio a Isaías para
SU pueblo – los judíos – hace casi 2700 años. Sus instrucciones se aplican
claramente a SU iglesia hoy. Estamos perdidos. Somos “tibios”. Y Apocalipsis
3:14-22 no es una perícopa (pasaje) fácil de leer. Sin embargo – esto es lo que
somos hoy.
Que DIOS tenga
misericordia de nosotros y nos muestre lo que ÉL quiere que “hagamos”. Y que
nos comprometamos a “hacer” más – para SU gloria y no para nuestro propio
beneficio.
“Aprendan
a hacer el bien,
Busquen la justicia,
Reprendan al opresor,
Defiendan al huérfano,
Aboguen por la viuda.”
Favor de escribir tus comentarios aquí. Gracias.
ReplyDelete