Thursday, November 27, 2025

Daré Gracias

Salmos 9:1 
Daré gracias al Señor con todo mi corazón; 
Todas Tus maravillas contaré.

Daré gracias al Señor… Esta ES una excelente manera de “hacer” hoy – todo el día. Y, de hecho, todos los días. Es un excelente hábito “contar nuestras bendiciones”. El hecho de que tengamos ojos que nos permitan leer estas palabras, oídos para escuchar a los demás, cerebros que puedan interpretar las imágenes que les transmitimos a través de nuestros ojos y oídos… ¡Tenemos MUCHÍSIMO por lo que estar agradecidos!

David era un hombre apasionado. ¡Danzaba para el SEÑOR! (2 Samuel 6:14). Lo que David sentía, lo sentía profundamente. Estaba agradecido con todo su corazón. David entendió el privilegio que le había sido dado al tener una relación con su Creador. Nuestro SEÑOR es un SER distinto. ÉL ES santo. Siempre ha sido eternamente perfecto. No necesitaba establecer una relación con nosotros. Pero – porque nos ama – nos redimió. Restauró nuestra relación con ÉL. Y tenemos el honor, el privilegio y la bendición de llamar a DIOS – Papá. ¡ÉL disfruta de una relación personal con nosotros! No por nada que hayamos hecho. ¡Sino porque nos ama y quiere compartir Su gloria y presencia eternas con nosotros! ¡Estaremos en Su presencia dentro de un millón de años! Y nos regocijaremos en ÉL. ¡Lo alabaremos por todo lo que ÉL ES y ha hecho por nosotros! Estaremos agradecidos con TODO nuestro corazón – en un millón de años… Y ahora – SI tan solo consideramos todo lo que DIOS ES y lo que ÉL ha hecho.

Hablaré de todas tus maravillas (obras maravillosas, cosas difíciles, milagros). Nuestro Señor ha hecho muchas cosas increíbles. Ya mencionamos nuestros ojos, oídos y cerebro. Nuestros cuerpos son increíblemente complejos. Cuando las sustancias químicas orgánicas se desequilibran ligeramente, sufrimos dramáticamente. Nuestros cuerpos son extremadamente sensibles a las sustancias químicas que necesitan para funcionar correctamente. Fuimos creados de manera asombrosa y maravillosa (Salmos 139:14). En el mismo sentido – pero al lado “macro” – el universo se expande más rápido que la velocidad de la luz. Las estrellas que apenas hemos fotografiado son hermosas. Desafían nuestra comprensión de la física tal como la conocemos. Nuestro Señor disfruta de Su poder. Disfruta de Su creatividad. Y la exhibe en todo su esplendor, en el universo y a nivel microscópico. Los átomos no son sólidos. Son fragmentos de energía vibrantes (a nivel subatómico). No entendemos mucho de física cuántica. Pero podemos “medir” parte de ella.

De todos los milagros maravillosos de Dios – el que LE “costó” fue el que nos da la eternidad con Él. El único milagro que Dios realizó – que requirió la separación de Su único Hijo del Padre y del Espíritu Santo – es nuestra salvación. Dios no solo nos salvó en la cruz – sino que conquistó la muerte. Restauró la creación. Un día, la creación será liberada de la angustia que actualmente padece. Gracias al milagro que Dios realizó en la cruz.

Nuestro Señor es grande. De verdad – más allá de nuestra comprensión – ¡GRANDE! Hay detalles en la cruz que no entendemos. Quizás nunca lo entenderemos. Lo que SÍ podemos hacer es –“observar” lo que la Biblia nos dice sobre la cruz. Y podemos estar profundamente agradecidos. Nuestro Señor nos dio la eternidad con Él. Porque así lo decidió. El precio que pagó para darnos la eternidad con Él está más allá de nuestra comprensión. Pagó un precio infinito por cada uno de nosotros. (Nuestro castigo eterno fue pagado en su totalidad). No podemos entender lo que esto significa. Somos seres finitos. Aunque no podamos entenderlo – SÍ podemos estar agradecidos. Todo el día. Hoy.

¿Y saben qué pasa cuando estamos agradecidos? Es interesante… Nos volvemos más pacientes. Nuestras expectativas de quienes nos rodean disminuyen – o desaparecen. Cuando practicamos estar agradecido.  Nuestro orgullo disminuye. Porque alguien que está agradecido se da cuenta de que no merece lo que le espera. Cuando estamos agradecidos por la eternidad en el cielo – no exigimos tanto de quienes nos rodean. En cambio, queremos ayudarlos. Estar agradecido genera humildad. Una persona agradecida no se percibe a sí misma como mejor o más importante. Porque no tenemos nada que nos haga mejores. Nuestro Señor nos ha dado la eternidad con Él. También nos ha dado todas las habilidades y talentos que tenemos. Cuando estamos agradecidos – llegamos a cualquier circunstancia solo deseoso de ayudar. Porque nuestro Señor nos sirvió primero. En la cruz. Y estamos profunda y apasionadamente agradecidos.
Daré gracias al Señor con todo mi corazón; Todas Tus maravillas contaré.

1 comment:

Nuestro Señor Está Cerca

Salmos 145:18  El Señor está cerca de todos los que Lo invocan,  De todos los que Lo invocan  en verdad. El SEÑOR está cerca de todos los qu...