Saturday, December 7, 2024

Entender Lo Que No Es Comprensible

Romanos 5:8
Pero Dios demuestra Su propio amor para con nosotros, 
en que siendo aún pecadores, 
Cristo murió por nosotros.

El amor de Dios.  ¿Podemos empezar a comprender este amor?  No creo que podamos.  Es un amor que es más profundo y más fuerte de lo que podemos captar.  Su amor nunca falla, nunca flaquea, nunca se detiene.  No podemos reunir tal constancia o profundidad en nuestros corazones temporales, caídos, egocéntricos pero redimidos.  ÉL ESTÁ más allá de nuestro entendimiento.  Sin embargo – ÉL TODAVÍA nos ama.

Dios demuestra SU propio amor hacia nosotros.  ÉL nos eligió antes de que se creara el mundo.  Dios hizo esto para poder “demostrarnos” QUIÉN ES ÉL.  Dios lo demuestra.  Él ES sabio.  Él ES omnisciente.  Y a ÉL le encanta enseñar a Sus escogidos – NOSOTROS.  Jesucristo “escogió” morir por nosotros cuando ni un solo ser humano lo “escogió” – jamás – Él demostró un amor que no podemos entender.  ÉL sufrió una eternidad de sufrimiento en la cruz – por cada uno de nosotros – uno a la vez.  Lo que yo habría soportado durante una eternidad de sufrimiento en el infierno y el lago de fuego – Jesucristo lo soportó.  Ahora, multipliquemos lo que habría sentido por los millones de “escogidos” que Él salvó – y tenemos lo que Él soportó en la cruz.  Cómo se “sintió” eso – nunca lo sabremos.  Es MÁS de lo que podemos entender.  Pero Jesucristo “escogió” hacer esto para “demostrar” Su amor hacia nosotros.  Quería que reflexionáramos / meditáramos sobre un concepto que no podemos entender.  Su amor.  Él “demostró” Su amor.  Dios no enseña de manera abstracta.  Él enseña en la vida real.  Utiliza temas cotidianos para enseñar.  En las parábolas que Jesucristo enseñó en los evangelios – sembradores de semillas, pescadores de hombres – Dios usa conceptos que podemos entender para “demostrar” ideas espirituales.  Y Él “demostró” Su eterno y profundo amor por nosotros en la cruz.

Romanos 5:8 presenta un argumento claramente sólido a favor de la predestinación de Dios de Su pueblo escogido.  Incluso si no tuviéramos Efesios 1 que dice claramente que Él nos escogió antes de que el mundo comenzara… Si no tuviéramos Romanos 8 donde Dios predestinó, llamó, justificó, glorificó (todos los verbos en tiempo pasado) a Su pueblo escogido… Si no tuviéramos Romanos 9 donde Dios afirma que ÉL creará humanos para Sus propósitos... Incluso sin todos estos textos, que son aún más claros en la predeterminación de los propósitos de Dios que Romanos 5:8, podemos determinar en este versículo que Dios es inmutable Y tiene un propósito en Su creación.  ÉL no está confundido ni dudoso de lo que sucede en esta vida.  ÉL SABE cada detalle.

Siendo aún pecadores… Muchos cristianos hoy combinan este concepto con su propio caos espiritual personal.  Ellos “piensan” que Jesucristo abrió una “puerta” en el cielo y aquellos que “escogen” ser salvos “reciben” su salvación porque Él abrió la “puerta” mientras eran pecadores.  La Biblia dice claramente: “Y ustedes, que estaban muertos en sus delitos y pecados”.  (Ef. 2:1)  Los humanos muertos (espiritualmente) no pueden “escoger” nada.  Éramos espiritualmente muertos.  Nada que pudiéramos hacer.  Alguna vez.  (Debemos “nacer de nuevo” para VIVIR. Sólo DIOS puede hacernos “nacer de nuevo”.) Otros cristianos, en su incesante deseo de alcanzar algún tipo de significado o mantener su orgullo, insisten en que Dios “miró hacia el corredor del tiempo” y aceptó a aquellos que lo “escogieron” durante sus vidas.  En otras palabras, Dios “miró” el siglo XX o XXI (para aquellos de nosotros que vivimos hoy) y “vio” quién Lo “escogería”.  Él "murió" por ellos hace 2,000 años porque ellos Lo "escogieron".

Esto no es algo que un Dios inmutable pueda hacer o permitir.  La inmutabilidad de Dios significa que ÉL no puede cambiar.  ÉL ES.  Constante.  Eterno.  Y ÉL no puede alterar lo que ÉL declara.  Tampoco ÉL puede aprender de nadie, jamás.  ÉL SABE.  Y en SU ​​conocimiento eterno, ÉL declara lo que ÉL haráÉL demuestra QUIÉN ES ÉL en nuestra existencia temporal para que podamos aprender de SU santidad y amor.

Cristo murió por nosotros.  Una vez más, palabras que hablamos.  Ideas que reflexionamos.  Pero no entendemos lo que significa “Cristo murió por nosotros”.  Dios nació.  María tuvo un bebé que era Dios Encarnado.  ¿Qué significa eso?  Soltamos muchas palabras e ideas en nuestro intento de comprender lo que Dios ha hecho.  Pero no entendemos lo que significa – Dios nació de una mujer.  Este bebé cubierto de mucosas, salpicado de sangre, arrugado y jadeante con ojos cafés es DIOS.  ¿Quién puede entender eso?  Y Jesucristo nació en este mundo caído, desagradable, orgulloso, egoísta, y duro de corazón para que ÉL pudiera demostrar SU amor cuando ÉL fue clavado en una cruz.  Desnudo.  Vencido.  La mayor parte de la carne de Su espalda se abrió.  Y ÉL nunca pecó.  El único “hombre” perfecto que jamás haya existido fue crucificado en nuestro lugar.  Porque ÉL nos amó primero.  ÉL nos amó lo suficiente como para morir por nosotros.  Y no sólo morir por nosotros – sino para llevar sobre Sí mismo nuestro castigo eterno (2 Cor. 5:21).  DIOS hizo pecado a Aquel que no conoció pecado.  (Más palabras sin sentido…)

¿Y cuál es una respuesta razonable a un amor tan profundo y tan puro que no podemos comprender?  Porque el amor de Cristo nos controla (constriñe), habiendo concluido esto: que uno murió por todos, luego todos murieron; (2 Cor. 5:14) “Morimos” a nosotros mismos y “vivimos” para ÉL.  Todo el día – hoy.  Y “vivimos” así todos los días – por el resto de nuestras vidas – hasta que nos arrodillamos ante ÉL.  Porque ÉL merece todo lo que somos y tenemos.  Le pertenece a ÉL.  Y “demostramos” nuestro amor por ÉL mientras “morimos” diariamente a nosotros mismos.  Porque ÉL nos amó más puramente y profundamente primero.

Pero Dios demuestra Su propio amor para con nosotros, 
en que siendo aún pecadores, 
Cristo murió por nosotros.

1 comment:

Apocaliptar (en TexMex) - Abrir / Desplegar / Revelar / Entrar La Puerta

Salmo 119:130  La exposición ( פֵּתַח   al abrirse) de Tus palabras imparte luz;  Da entendimiento a los sencillos.   Es BUENO “revisar” los...