Seamos "Luz" Con La Vida Que Dios Nos Prestó

Mateo 5:16 

Así brille la luz de ustedes delante de los hombres, 

para que vean sus buenas acciones 

y glorifiquen a su Padre que está en los cielos.

JESUCRISTO acababa de impartir lo que muchos historiadores (tanto creyentes como no creyentes) consideran una de las enseñanzas más eficaces de la historia de la humanidad – las Bienaventuranzas. Las enseñanzas del Sermón del Monte (Mt. 5:1-7:29) son sublimes y profundas. Replantean “cómo” la humanidad debe “vivir” esta “vida”. La mayoría de las veces, los cristianos no “escuchamos” ni “aplicamos” las enseñanzas de JESUCRISTO en SU sermón. Sería prudente leer estos tres capítulos del libro de Mateo (5 - 7) y pedirLE a nuestro Señor que nos “muestre” SU “camino” de “hacer” esta vida. A nuestro SEÑOR no LE importan las posesiones ni la comodidad en “esta vida”. ÉL SABE que nos espera la eternidad. ÉL SABE que comparte con nosotros en nuestros corazones la VIDA ETERNA que nos ha dado. Y con este “conocimiento sobrenatural” – ÉL quiere que “vivamos para ÉL”.

SI “hacemos” esto – nuestra "luz brillará ante los hombres". “Buscaremos la justicia, amaremos hesed (amor fiel - la misericordia) y andaremos humildemente con nuestro Señor” (Miqueas 6:8). Alzaremos la voz cuando otros falten al respeto o lastimen a quienes nos rodean. Buscaremos SU justicia. Ayudaremos a otros a distinguir el bien del mal. No apoyaremos las escuelas públicas ni su ideología de corrupción moral infantil. Protegeremos a los inocentes. Los libraremos del peligro espiritual que esta sociedad impone. Cuando “buscamos la justicia” – “hacemos” lo correcto. Expresamos “rectitud”. No apoyamos “el mal” con la contribución silenciosa de nuestras vidas o las de nuestros hijos en el altar de Satanás. Nos apartamos del mal.

SI “hacemos” el sermón de JESÚS – amaremos a  los demás como a nosotros mismos. Priorizaremos su bienestar. Seremos “dadores” – no “receptores” (quienes que “reciben / toman”). ¿Qué “clase” de vida llevas? ¿“Das” más de ti cada día de lo que aceptas o recibes de los demás? Deberíamos. Si somos cristianos – SABEMOS que nos espera la eternidad en el cielo. Podemos dar TODO lo que somos y tenemos aquí.  Porque TODO es polvo. No poseemos nada y no tomaremos nada. Así que – da a los demás lo que nunca será tuyo. Y haz de este polvo un “tesoro en el cielo” donde ni la polilla ni el óxido pueden dañarlo (Mt. 6:19-24 - parte de SU sermon).

SI “vivimos” el Sermón del Monte – caminaremos humildemente con nuestro SEÑOR. Ya no “necesitamos” la atención ni la aprobación de los demás porque tenemos SU aprobación eterna. Tenemos SU aprobación – no porque hayamos “hecho” algo correcto – sino porque ÉL nos amó a pesar de “quiénes” éramos (y somos). SU aprobación eterna — SU adopción como hijos Suyos — significa que ya no necesitamos definirnos por nada más que SU título – siervos. Debemos servir a los demás como ÉL nos sirvió. Nuestro SEÑOR es humilde. Y ÉL respetuosamente nos pide que seamos lo mismo. Sin orgullo. Sin atribuirnos ningún mérito por lo que “hacemos”. Si “hacemos” algo que merezca el “crédito” — algo digno de ÉL y de SU nombre — lo “hacemos” porque ÉL lo planeó antes de crear el sol (Efesios 2:10).  

Así que – HOY – mis queridos hermanos y hermanas. “Mueran” para poder VIVIR para JESUCRISTO. Busquen SU justicia. Pidan, con humildad, que quienes los rodean hagan y sean justos. Amen a quienes los rodean. No con palabras (aunque también pueden decírselo 😊). Ámenlos con acciones. “Hagan” las pequeñas cosas que demuestran su amor. Y sean humildes. No somos “buenos” por nosotros mismos. Somos “buenos” (los pocos momentos en que realmente lo somos) porque ÉL puso al ESPÍRITU SANTO en nosotros. Y nuestro SEÑOR aceptará el mérito de cualquier “bien” que “hagamos” en esta vida. Honren a JESUCRISTO hoy. Y disfrutarás de este día que ÉL les ha provisto - profundamente.

Así brille la luz de ustedes delante de los hombres, 

para que vean sus buenas acciones 

y glorifiquen a su Padre que está en los cielos.