Saturday, November 30, 2024

Se Despojó a Sí Mismo

Filipenses 2:7
sino que se despojó a Sí Mismo 
tomando forma de siervo, 
haciéndose semejante a los hombres.

Este versículo está más allá de nuestra completa comprensión.  Podemos (y debemos) reflexionar sobre su significado.  Jesucristo se “despojó” (kενόω – kenoō) a Sí Mismo.  Él “dejó a un lado / despojó / vació” Sus derechos divinos.  ¿Cómo?  ¿Cuánto?  ¿Fue omnisciente mientras estuvo encarnado?  Tenemos la respuesta a esta pregunta – Jesucristo no “lo supo todo” mientras estuvo encarnado.  “Pero del día y la hora nadie sabe, ni siquiera los ángeles del cielo, ni el Hijo, sino sólo el Padre.  Porque como fueron los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre”. (Mt. 24:36-37) Se “maravillaba” de la fe del soldado romano. (Mt. 8:10; Lc. 7:9) Él fue sorprendido porque no sabía que el soldado confiará tanto en Él - se "maravilló".  Jesucristo se “despojó” de algunos aspectos de Su omnisciencia mientras caminó sobre esta tierra.  No entendemos “cómo” hizo esto o “cuánto” “dejó a un lado / despojó / vació”.  Pero sabemos que lo hizo porque la palabra inspirada de Dios así nos lo dice.  Él “dejó de lado” – de alguna “manera”- Sus “derechos divinos” como Dios.  Mantuvo Su deidad mientrás que "puso a un lado" algunos aspectos que Le pertenecían.  

Y tomó sobre Sí la forma de un siervo (̈δολος – doulos).  Los siervos no tienen derechos.  Pertenecen completamente a su dueño.  Jesucristo vino a hacer la voluntad de Su Padre.  Se “vació” de sus derechos como Dios y se convirtió en un “siervo sin derechos”.  “El Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos”. (Mt. 20:28) Si Jesucristo no hubiera elegido amarnos con Su vida perfecta – y morir en nuestro lugar (sustitutivo) – todos estaríamos eternamente condenados al infierno y luego arrojados a un lago de fuego.  “Porque conocen la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que siendo rico, sin embargo por amor a ustedes se hizo pobre, para que por medio de Su pobreza ustedes llegaran a ser ricos”. (2 Cor. 8:9) “Y hallándose en forma humana, se humilló a sí mismo haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz”.  (Filipenses 2:8) Los creyentes de hoy deben considerarse siervos o esclavos de Cristo (1 Corintios 7:22; Efesios 6:6; 2 Tim. 2:24). Él es nuestro Señor y nuestra lealtad se debe únicamente a Él. Como siervos, renunciamos a otros amos (Mt. 6:24) y nos entregamos totalmente a Él (Mt. 16:24).

Fue “hecho a semejanza de los hombres”.  Sabemos que Jesucristo fue 100% humano y 100% Dios mientras caminó sobre esta tierra.  No “entendemos” exactamente “cómo” hizo esto.  Hay un misterio que nuestras mentes finitas deben reflexionar.  Dios – el eterno YO SOY – el Creador de la creación – se hizo hombre.  Nosotros lo decimos.  Pero las palabras no son convincentes.  ¿Qué significa – Dios se hizo hombre? No comprendemos todo lo que Él ha hecho por nosotros.  Sabemos que es verdad porque Él es perfecto y Su palabra nos dice que esto sucedió.  “Cómo” hizo esto y “qué” significa es más profundo de lo que nuestras mentes finitas pueden captar.  Podemos (y debemos) reflexionar sobre estos conceptos eternos.  Mientras meditamos en “qué” nuestro Señor ha hecho y “cómo” lo hizo, nuestro aprecio por Su amor se profundiza.  Nuestro deseo de honrarLo crece.  Queremos seguirLo en Su muerte para poder honrarLo más.  Como dijo tan sabiamente Pablo: “Ahora me alegro de mis sufrimientos por ustedes, y en mi carne, completando lo que falta de las aflicciones de Cristo, hago mi parte por Su cuerpo, que es la iglesia”.  (Col. 1:24) No es fácil ni agradable “morir por Cristo”.  Nuestra carne insiste en el consuelo, la tranquilidad, “una vida mejor” en esta vida caída.  Mateo, el recaudador de impuestos, escuchó a Jesucristo, nuestro Señor (recuerde que somos doulous – esclavos de Cristo – Ef. 6:6) decir estas palabras –  Entonces Jesús dijo a Sus discípulos: “Si alguien quiere venir en pos de Mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y que me siga.  Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda su vida por causa de Mí, la hallará.
sino que se despojó a Sí Mismo 
tomando forma de siervo, 
haciéndose semejante a los hombres.

1 comment:

AMADOS Somos - Por SU Gracia Eterna

1 Juan 4:7  Amados,  amémonos unos a otros,  porque el amor es de Dios,  y todo el que ama es nacido de Dios  y conoce a Dios. Amados – ¡qué...