Pureza Sexual

 

 Proverbios 5

Por favor lea Capítulo 5 de Proverbios 

12 Y digas: ¡Cómo he aborrecido la instrucción,
Y mi corazón ha despreciado la corrección!

13 No he escuchado la voz de mis maestros,
Ni he inclinado mi oído a mis instructores.

14 He estado a punto de completa ruina
En medio de la asamblea y la congregación.

Salomón, el hombre más sabio que jamás haya existido, instruye a sus hijos sobre la importancia de la pureza sexual.  Proverbios 5 explica la importancia de no cometer adulterio.  Él no niega la pureza de los deseos sexuales dada por el Creador a los seres humanos.  Lo que Salomón deja perfectamente claro es que la satisfacción sexual sana sólo puede encontrarse en los vínculos del matrimonio.  El joven en capítulo 5 debe aprender a mantenerse alejado de la lujuriosa mujer casada.  Según versículo 14, el joven era miembro del templo (la "iglesia").  Sabía que estaba equivocado y casi decidió seguir su lujuria.  El precio a pagar por el adulterio es muy caro.  Cambia inalterablemente su futuro.  Dará su riqueza emocional, física y financiera a extraños por su falta de integridad. 

Este tema es aún más importante hoy.  Estados Unidos se ha convertido en el líder mundial en libertinaje y corrupción sexual.  La cultura estadounidense presiona a los niños a pensar en sexo y temas sexuales a la edad más temprana posible.    Los padres de los jóvenes hoy no comprenden el daño que se les causa a los niños que son "presionados" a pensar en temas sexuales todos los días.  Puede que no sea un comentario abierto y cotidiano, pero la "presión cultural" para que los jóvenes piensen en sexo es constante y completamente inmoral.  Estados Unidos está bajo el juicio de un Dios vivo.  Creó el "tejido" de vida que traerá dolor y destrucción a los jóvenes que piensan que pueden tener relaciones sexuales fuera del matrimonio sin costo alguno (1 Cor. 6:18-19).  Como adultos y padres, nos equivocamos al creer que podemos someter a nuestros hijos a esa "presión cultural" sin consecuencias.  Cosechamos lo que sembramos.  Se necesitan algunos años, pero la cosecha del juicio que Dios ha puesto sobre los Estados Unidos no será placentera para los jóvenes que viven en estos tiempos si sus padres (y el cuerpo de Cristo que ellos asisten) no responden adecuadamente a la "presión cultural" que se les impone.  Debemos hacer más que simplemente orar por ellos porque la "cultura" de los Estados Unidos está haciendo mucho más para confundirlos que simplemente pensar en ello.